La expresión viene de la terminología naval y fue adoptada por el mundo de la moda para describir aquellas tiendas que, por su carácter singular, pueden llevar “la bandera” de la cultura y la imagen de la marca.
Una Flagship Store, es la tienda más importante de una marca. Es el buque insignia de las firmas sobre todo las de lujo que se han convertido en una poderosa herramienta de creación y potenciación de imagen. También tiendas como MANGO, ESPRIT, ZARA y H&M ya tienen las suyas en las ciudades más emblemáticas de la moda.

Una de las características más importantes para poder entender mejor este concepto, es que en general, son tiendas muy grandes en cuanto a superficie. Las hay desde los 1.000 hasta los 5.000 metros cuadrados aunque también existen con menos superficie.
Se caracterizan también por tener una arquitectura especial, que sea capaz de comunicar la esencia de la marca.
Las Flagship Stores siempre están ubicadas en calles muy estratégicas, céntricas y comerciales. Con mucho tráfico de gente local y turistas y las ciudades preferidas de las grandes marcas de la moda son Tokio, NY, Paris y Londres.
El arte conceptual es muy importante en esta clase de tiendas, y en general los diseñadores trabajan muy de la mano con los arquitectos en la decoración para que forme parte del concepto total de la tienda. Ningún detalle queda descuidado.
En Europa, lo más habitual es que se escojan edificios emblemáticos o con historia y se crean las tiendas respetando su pasado. En Asia, es más fácil encontrar que este tipo de tiendas emergen del medio de la ciudad como edificios modernistas muy armónicos con la naturaleza y usando materiales ecológicos.
Los productos elegidos para estar presente en las Flagship Stores, son por lo general los más icónicos y tradicionales en combinación armoniosa con los más vanguardistas capaces de atraer a los más sofisticados marcadores de tendencias.
Su propósito es generar y ofrecer un valor añadido a los productos de las marcas y crear una experiencia inolvidable de compra en donde se puede mezclar arte y cultura, compras y ocio. Se utilizan también para comunicar o potenciar líneas nuevas de productos rentables, y el objetivo principal es que se transformen en generadoras de altos volúmenes de ventas de mercado.
Con esto se llega a la conclusión de que arquitectura y moda son dos artes que muy a menudo se dan la mano y resulta imprescindible que así sea en la creación de tiendas Flagship Stores.
Prada& Rem Koolhaas Una ola de madera domina la tienda de Prada en Nueva York ideada por el arquitecto Rem Koolhaas. Un nuevo concepto que nació en 2001 con la intención de revolucionar las tiendas de moda, que dejaban de ser sólo un sitio donde comprar ropa para ser un ‘todo’ donde también encontrar exposiciones, performances… puro arte.
StuartWeitzman & Zaha Hadid Uno es americano, diseña zapatos y es el favorito de la celebrities en la alfombra roja. La otra es iraquí, crea edificios pero también toca la pintura, la escultura o el diseño de muebles y fue la primera mujer que ganó el Premio Pritzker en 2004. Estos dos titanes han creado varias tiendas que son casi templos del arte y están repartidas por Milán, Hong Kong, Roma y Nueva York.
(Tiendas de Hong Kong y Milán)
Valentino& David Chipperfield. Dos grandes representantes de Italia e Inglaterra como el diseñador Valentino y el arquitecto David Chipperfield unen fuerzas a través de boutiques como la de Vía Montenapoleone de Milán o la que pronto se abrirá en la Quinta Avenida de Nueva York. Chipperfield también ha coqueteado con firmas como Issey Miyake o Dolce & Gabbana.
Hermès& Renzo Piano Inspirada en las lámparas de papel, la tienda ubicada en Tokio diseñada por el italiano Renzo Piano para Hermès es otro de esos espacios que merece la pena visitar no sólo para comprar. Un lugar sobrio y elegante, al más puro esto de la firma, que también da cobijo a talleres, áreas multimedia, zonas para exponer y una terraza jardín.
No hay comentarios:
Publicar un comentario